Chan-woo, tras 5 años de estudio para ser oficial de policía, se encuentra con amigos para cenar y pedir dinero para su examen, pero termina embriagado. Pierde el conocimiento y despierta sin recordar lo sucedido en la casa de su vecino donde descubre un cadáver ensangrentado. Conmocionado, regresa apresuradamente a su habitación sin su teléfono. Olvidó que la puerta está cerrada, así que usa una cuerda para llegar a la habitación contigua. Recupera el teléfono, pero no puede volver debido a que en el pasillo se encuentra con pastores evangelizando. Sabe que es el último día para su examen y se pone ansioso mientras el tiempo se agota.